La Secretaría de Trabajo volvió a estar en la mira ante una nueva denuncia de nuevos hechos de violencia laboral o «mobbing». En esta oportunidad, la persona damnificada es una delegada gremial.

La Secretaría de Trabajo se vio envuelta en un nuevo escándalo por «hechos de hostilidad y persecución» dentro de la Dirección de Relaciones Laborales en Santa Rosa.

Los hechos se suman a los informados por LA ARENA semanas atrás, cuando la FIA decidió desestimar, pese a las notas y testimonios que apuntaban al ex delegado de la entonces Subsecretaría de Trabajo Nicolás Iglesias Gutiérrez (quien no volvió a asumir luego del 10 de diciembre de 2019 en su cargo) y el dictamen emitido por la Secretaría de la Mujer.

En el expediente, las denunciantes apuntaron a Iglesias Gutiérrez por violencia laboral y luego señalaron por violencia institucional al propio secretario de Trabajo, Marcelo Pedehontaá.

Ahora, quien denunció los episodios fue la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). El sindicato que nuclea a los empleados estatales le envió una nota a la delegada de Relaciones laborales, Daniela Dieser, para llamarle la atención sobre los hechos de «violencia laboral» ejercidos contra una delegada del gremio.

Situación insostenible.
La decisión de ATE de intervenir oficialmente se dio a raíz de una situación que al parecer se tornó insostenible dentro del área, donde aparentemente las situaciones de hostigamiento denunciadas en su momento no cesaron. El gremio actuó ante las «nefastas» respuestas que recibió su delegada por parte de las autoridades ante una serie de planteos que se hicieron por escrito.

De esta manera, el Consejo Directivo Provincial de ATE le envió una nota a la delegada de Relaciones Laborales para solicitar que «cese la actitud de hostilidad y persecución» hacía sus afiliados, como así también «la violencia laboral hacia nuestra delegada normalizadora».

En este caso puntual, mencionaron que el pasado 11 de septiembre se la increpó por nota «por no realizar sus tareas en el sector».

Sin embargo, señalaron que «no se le asignan tareas, las cuales la trabajadora jamás se negó a realizar y siempre ha estado dispuesta». A su vez, denunciaron que «tampoco tiene los elementos de trabajo como PC y otras, ya que la tarea se la están asignando diariamente a un pasante de la repartición».

«Tampoco se acondicionó su lugar, como se había hablado en una reunión con la Secretaría de Trabajo», advirtieron y remarcaron que estas actitudes corresponden con un caso «mobbing» o «violencia laboral».

Posible denuncia.
Desde ATE tomaron conocimiento de la respuesta a la nota elevada por la compañera delegada» y consideraron que «es improcedente, ya que es de un tono de acusación y hostilidad hacia la tarea gremial para la que fue nombrada».

En ese sentido, advirtieron que, en caso de no cesar «la persecución y hostilidad hacia nuestros afiliados y a la delegada normalizadora, la cual raya en prácticas antisindicales», se verán obligados a denunciar ante la Fiscalía de Investigaciones Administrativas (FIA). «Estamos a poco de tomar medidas de acción directa», reveló en esa línea una fuente sindical consultada por este diario.