La caída en las ventas preocupa a los estacioneros porque se suma al aumento en el costo de las tarifas de energía eléctrica y gas. «Estamos preocupados, sobre todo para mantener los puestos de trabajo», advierten desde CECLA.
El vicepresidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles de La Pampa (CECLA), Roberto Martínez informó que el sector tuvo una caída del 25% en la venta de nafta y gasoil durante el mes de marzo, comparado con el mismo mes pero del año pasado. El sector se declaró en alerta por la crisis y anticipó que podría haber despidos de personal en los próximos meses si la situación económica no mejora.
A nivel nacional, las ventas de combustibles de marzo registraron el mayor desplome en 37 meses en el país. Tuvieron una caída del 12,1 % al totalizar 1,2 millones de metros cúbicos, según destaca un informe de la consultora Politikón Chaco
El panomara no es el mejor y podría complicarse aún más en los próximos días a partir de la decisión del Gobierno Nacional de autorizar un nuevo aumento en el precio. El impuesto a los combustibles debería subir un 53 por ciento el 1 de mayo. Si la suba se traslada plenamente al precio, la nafta súper podría aumentar entre un 7 y un 8 por ciento.
«Hay noticias a nivel nacional de que el gobierno va a seguir actualizando el tema de los impuestos de los combustibles. Estos impuestos que se van a actualizar en mayo corresponden al último trimestre del 2023, recordemos que estos impuestos durante el gobierno anterior estuvieron suspendidos durante 10 trimestres», explicó Martínez.
«Los aumentos repercuten en la demanda de combustibles, tenemos una caída estrepitosa sobre todo en los productos premium, tenemos una caída del 25% en comparación con marzo del año pasado y esas ventas no se pueden recuperar», admitió.
Agregó que «el gasoil es muy de la actividad agropecuaria y ahora el campo está con la cosecha gruesa, entonces ahí vemos un repunte, pero no se están llegando a los valores del año pasado, aunque se está recuperando, estaremos un 4, 5% abajo».
«Esto nos tiene muy preocupado, porque sumado a la baja de las ventas, a subido un montón la corriente eléctrica, ahora se viene el aumento sideral de gas y estamos preocupados porque los costos fijos son muy caros. Estamos preocupados sobre todo para mantener los puestos de trabajo, si es que sigue bajando el consumo y tenemos poca demanda», afirmó.
Según Polikón Chaco, en marzo de 2024 se vendieron en todo el país 1,39 millones de metros cúbicos de combustible al público. De ese total, el 56% de las ventas se correspondió a naftas y el 44% restante a gasoil.
Comparado contra igual mes de 2023 las ventas mostraron un descenso del 12,1%. Las naftas exhibieron una caída interanual del 9,4% (con impulso de la premium con -23,3%) mientras que el gasoil lo hizo en -15,4% (con mayor fuerza en el común con -16,6%).
Aumento
Pese a la caída de la venta de combustibles, se trasladaría la suba pendiente del último trimestre de 2023 del impuesto a los combustibles líquidos.
Por la actualización del impuesto a los combustibles líquidos prevista por el Gobierno en el decreto 107/24, las naftas podrían subir un 8% a partir del 1° de mayo. El aumento implica trasladar al monto fijo que se abona por litro de nafta, la inflación del último trimestre de 2023.
Pese a la caída de las ventas de combustibles, que según informó la secretaría de Energía, cayeron en el orden del 5,94% para el gasoil y de 6,7% para la nafta en la comparación interanual del primer trimestre del año, el Gobierno avanzaría con la actualización del tributo que estuvo congelado por más de dos años y medio, ya que necesita ponerlo al día para reforzar la recaudación.
Según los cálculos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el monto se incrementará en línea con la inflación del último trimestre 2023, lo que resulta en un total de 70 pesos, llevando el tributo desde $132 a $202 por litro. Un incremento del 53%.
Con la actualización de mayo, se terminaría incorporando la inflación de 2023, quedando solo pendiente el 2024, cuyo primer trimestre está estipulado actualizarse a partir de julio. En caso de llevarse a cabo todo tal cual está programado, en julio habría otro ajuste en línea con la inflación de enero a marzo, un 51,6%,llevando el impuesto a $306 por litro.