Una madre fue condenada a seis meses de prisión en suspenso por ser autora del delito de lesiones leves, agravadas por el vínculo en contexto de violencia familiar, en perjuicio de su hija de 14 años. A su vez se le unificó la pena con otra anterior, dictada hace dos meses, y se le fijó una pena única de un año y seis meses de prisión de ejecución condicional.

Por otro lado, el juez de control santarroseño Carlos Chapalcaz, le impuso el cumplimiento de reglas de conducta por dos años, entre ellas la prohibición de acercamiento a menos de 200 metros y de contacto con su hija; y la obligación de realizar un tratamiento psicológico.

En realidad, ese impedimento rige desde el 10 de marzo, el día siguiente de la denuncia.

El fallo fue dictado a partir de un acuerdo de juicio abreviado presentado, de común acuerdo, por el fiscal Oscar Cazenave, la defensora oficial María Marchisio y la propia imputada, una mujer de 43 años que admitió su culpabilidad. También se le dio vista a la asesora de Niñas, Niños y Adolescentes, Graciela Massara, quien dio su consentimiento. Con respecto a la menor, que estuvo acompañada por una persona adulta referente, solicitó expresamente que se incluyera la prohibición de acercamiento y contacto.

¿Cuáles fueron los hechos probados? Haber agredido física y verbalmente a su hija, tal cual lo había relatado una auxiliar docente del colegio al que asiste la adolescente ante la Unidad de Género, Niñez y Adolescencia de la Policía. Incluso reveló que la estudiante le había pedido hablar en privado y que en ese contexto le dijo que su progenitora la golpeaba y que no quería volver a su domicilio.

El examen médico demostró que la víctima tenía hematomas y excoriaciones en el brazo izquierdo y en el muslo y la pierna derecha; y además refirió dolores en la espalda y el hombro izquierdo.

Antecedente.

La pena de seis meses en suspenso terminó siendo una pena única de un año y seis meses de ejecución condicional, porque el 11 de marzo pasado -a las 48 horas de la denuncia-, la madre había sido sentenciada por la jueza de control María Florencia Maza, en otro abreviado, a un año en suspenso por agresión con arma sin causar lesiones, en concurso real con portación de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal.

Finalmente, Marchisio pidió que a futuro el Juzgado de Ejecución pueda modificar las reglas de conducta, en caso que así se lo considere teniendo en cuenta el interés superior de la adolescente.