Gustavo Nicolás Rincón Verburg, un joven de 27 años, que formaba parte del Ejército Argentino, como soldado voluntario, falleció ayer en Santa Rosa víctima de una intoxicación en su casa provocada por la «calefacción». Fuentes judiciales informaron a este diario que la víctima utilizó las hornallas y el horno de su vivienda, en la calle Hucal, casi Bertera, para calefaccionar, algo que provocó que el oxígeno del edificio se consumiera, provocando la muerte silenciosa del morador.

De acuerdo a la información recabada por este diario de fuentes policiales y judiciales, fue el padre de la víctima quien se encontró con el triste panorama, pues se llegó a su casa pasadas las 18 porque su hijo no respondía los mensajes, ni los llamados. El hombre se comunicó con la Policía y con el Servicio de Emergencias Médicas pero ya era tarde y no había nada por hacer para salvarle la vida.

Sin oxígeno.
«La causal del fallecimiento se dio por falta de oxigenación. Camuzzi tomó los niveles y no había monóxido de carbono en los niveles de la casa de Colonia Escalante de la semana pasada, pero el joven tenía calefaccionada la casa con el horno y las hornallas. Supuestamente lo que hace el horno y las hornallas es consumirte el oxígeno. Murió por falta de oxígeno», explicaron.

Otro dato que surgió de la revisión que realizaron las autoridades y la empresa prestadora del servicio de gas natural en la vivienda del Plan 5000 fue que las rejillas de ventilación estaban tapadas. «Murió por envenenamiento», confió el fiscal interviniente Oscar Cazenave ayer por la tarde.

Los datos sobre el causa de la muerte se conocieron ayer por la tarde cuando los médicos forenses enviaron a la Fiscalía los resultados de la autopsia practicada sobre el cuerpo de Rincón. La casa donde se produjo el desgraciado incidente está ubicada frente a la Delegación Sur de la Policía.

Toque de silencio.
Los restos del soldado fueron despedidos ayer a la tarde en el Cementerio Parque. Sus camaradas de la Compañía de Comunicaciones Mecanizada 10 le realizaron la despedida junto a los familiares y amigos. Tanto en la Sala Velatoria de la CPE como en el cementerio los uniformados lo despidieron con una formación y con la interpretación del Toque de Silencio.

Las circunstancias de la muerte del joven trajeron de inmediato el recuerdo de la tragedia ocurrida hace apenas una semana en Colonia Escalante, cuando una pareja mayor de edad, dos adolescentes y dos niñas murieron por inhalar monóxido de carbono producto de la combustión de una pantalla que utilizaban para calefaccionarse.