La droga estaba distribuida en panes dentro de un vehículo, escondida en un compresor. Una perra de la policía, “Pampa”,  marcó la presencia de marihuana. 

La policía provincial secuestró el lunes por la noche 40 kilos de marihuana distribuida en panes en el interior de un vehículo con dos conductores, que fueron detenidos en el control del  puesto caminero de la localidad de Catriló. Los policías detectaron un irregularidad en los papeles del auto y decidieron utilizar la perra adiestrada para encontrar drogas prohibidas porque observaron cierto nerviosismo una de las personas detenidas.

La perra “Pampa” señaló la presencia de sustancias sospechosas y, una vez convocada la División de Toxicomanía, se hallaron los panes de marihuana en el interior del auto. Los panes estaban escondidos adentro de un compresor.

Los dos ocupantes provenían de Morón, Buenos Aires, con destino a la ciudad de Neuquén. Quedaron detenidos a disposición del Juzgado Federal de Santa Rosa. Son dos personas jóvenes. Harán allanamientos en esa ciudad del sur.

El operativo se desencadenó a las 22.30 horas en el puesto caminero. Dos agentes policiales identificaron a dos personas que circulaban en una Saveiro azul. Tenían permiso para circular pero en los papeles del auto hallaron una irregularidad. En esa situación, uno de los policías, el agente Matías Viale, decidió utilizar la perra porque observó señales de nerviosismo en los demorados. El otro policía que actuó es Nicolás Barrio.

El can -adiestrado en la sección Canes de la URI- fue entregada hace un tiempo al puesto caminero.   Anoche marcó la presencia de sustancia sospechosa en el auto.

Después de un rato, con el aval del Juzgado Federal de Santa Rosa, arribó el personal de Toxicomanía, que halló la droga distribuida en panes en el vehículo.