Por Norberto G. Asquini

Se cumplen cuarenta años de la recuperación de la democracia en la Argentina. El 30 de octubre de 1983 las y los argentinos volvieron a votar después de la dictadura militar, y el 10 de diciembre asumía Raúl Alfonsín como presidente. Fueron elecciones fundacionales del actual y más extenso período democrático que ha vivido nuestro país. Cuatro décadas del gobierno del pueblo a pesar de las crisis (y que las hubo) que atravesó el país.

Para recordarlas en La Pampa, publicamos las fotografías en blanco y negro que acompañan este artículo. Momentos vividos de la campaña electoral del 83 y de la votación que parecen antiguas, pero que tienen un simbolismo tan actual y vigente. Sobre todo en momentos en que el consenso democrático nacido en esos años es permanentemente tensionado (cuando no puesto en duda) por algunos sectores.

Recordemos cómo fueron las elecciones del 83. Después de la guerra de Malvinas el proceso de transición a la democracia se aceleró mientras la dictadura se caía a pedazos. El gobierno de facto convocó a elecciones y los partidos se pusieron en marcha. Ya en la campaña electoral se observó que la competencia se iba a dar entre los dos partidos mayoritarios: el peronismo y el radicalismo. Y comenzó a sobresalir la figura de Alfonsín como alternativa a un estado de destrucción y de esperanza para afianzar la nueva era democrática.

En La Pampa la disputa se dio entre tres fuerzas: el peronismo, el radicalismo y el Movimiento Federalista Pampeano (Mofepa). El Partido Justicialista afrontó la elección dividido, arrastrando las diferencias que lo habían marcado entre santarroseños y piquenses. Afrontó una internas con cuatro listas: la Naranja, encabezada por Rubén Marín; y la Azul con Esteban Rolando, ambas con epicentro en General Pico; y la Verde de Néstor Ahuad y la Blanca del ex gobernador José Regazzoli, de Santa Rosa. El 27 de julio se impuso la Naranja con el 47% de los votos arrasando en General Pico y en casi todo el interior.

El radicalismo también fue a interna, entre la Celeste y Blanca con Antonio Berhongaray como candidato contra el piquense César Norberto, ganando el primero por amplia mayoría.

El tercer espacio era el Mofepa, un partido provincial nacido bajo el liderazgo de Ismael Amit, que había apoyado al Proceso y se había hecho cargo del gobierno de La Pampa en 1982 con Ricardo Telleriarte. En febrero de 1982, Telleriarte dejó la gobernación para poder ser candidato a gobernador.

Si en los años setenta la disputa se había dado entre el peronismo y el Mofepa, esta vez el radicalismo contó con el “Alfonsinazo”, hoy lo llamaríamos la “ola Alfonsín”, que le dio la fuerza para polarizar con el PJ. En tanto el Mofepa, que también apoyó a Alfonsín como su candidato a presidente, sufrió la fuga de respaldo por su asociación con la dictadura saliente.

La campaña dio cuenta de los nuevos tiempos, se observó una sociedad movilizada y esperanzada en la democracia que dejaría atrás los años oscuros y en la restauración del país golpeado económica e institucionalmente. Los actos fueron masivos con un nivel de efusividad que mostraba la necesidad de sacarse el miedo de encima.

El 30 de octubre se votó. Alfonsín arrasó a nivel nacional con el 52% de los votos. En La Pampa hubo ocho fórmulas, pero la competencia se centró entre el PJ y la UCR. El peronismo ganó con Rubén Marín que obtuvo 50.094 votos (el 40,7% de los positivos), sobre la UCR (32%) y el Mofepa (20%). La UCR contó con el empujón que le dio el “Alfonsinazo”: Alfonsín ganó en la provincia con el 41,4% (50.784 voto) sobre Italo Lúder del PJ que alcanzó el 40,9% (50.157 votos), apenas hubo 627 sufragios de diferencia. De esta manera, el peronismo volvió al gobierno y la UCR pasó a ser la principal fuerza de oposición.

El peronismo además ganó las intendencias de Santa Rosa (39,8%) y la de General Pico (48%) y 25 de las 41 intendencias restantes (no se votaba en las comisiones de fomento). Mientras los apoyos en la oposición se dividieron entre radicales y mofepistas, en el peronismo se notó el “voto leal”: en cada localidad la boleta fue completa, sin cortes, a presidente, gobernador e intendente (en Santa Rosa sacó 11.916 a presidente, 11.318 a gobernador y 11.981 a intendente).

El 30 de octubre, Alfonsín festejaba a nivel nacional y el peronismo en la provincia iniciaba su hegemonía que se extiende, hasta ahora, por 44 años continuados de gobiernos, cuando en 2027 finalice su período Sergio Ziliotto.