– Norberto G. Asquini –

La oposición de Juntos por el Cambio va preparando el camino para 2023. Lo que antes era un camino sembrado de diferencias y desencuentros, ahora aparece allanado a los consensos entre radicales y el PRO, y sus aliados, más allá del juego político de cada uno.

Luego de las elecciones legislativas de 2021 que ganó en La Pampa JxC, los puentes se tendieron entre unos y otros. “Hay una nueva mirada y hay confianza, algo que era totalmente imposible hasta hace dos años”, se confiesa un dirigente del PRO. De las resistencias radicales se pasó a una búsqueda de acuerdos para llegar lo mejor armados a las próximas elecciones. Es que tampoco hay mucho tiempo más, el horizonte más seguro es que en diciembre o enero tendrían que estar las listas.

Ese avance de los entendimientos se da en el terreno. En los últimos días se presentaron las mesas políticas de JxC en General Pico y Santa Rosa. En los próximos días se preparan las de Intendente Alvear y 25 de Mayo. En General Acha ya estaba armada de hecho cuando el radical Abel Sabarots ganó la elección a intendente y asumió con un equipo detrás suyo de radicales, amarillos, independientes y algún peronista. Una gestión ordenada y que le cambió la cara a la ciudad cimentó la alianza local que fue mostrada por los cambiemitas achenses como el ejemplo que debía seguir el resto de la provincia.

Los entendimientos, sobre todo entre dos de las principales figuras de ambas fuerzas como son el senador Daniel Kroneberger (UCR) y el diputado Martín Maquieyra (PRO), no significa que dejen de lado la competencia, sino que se buscan más racionalidad en las prácticas y la disputa. Algunos entienden que ya habría un acuerdo entre ambos para repartirse la gobernación y la intendencia de General Pico, pero lo que se sabe que por ahora los dos dejaron en claro en una charla sus intenciones de disputar quien encabezará JxC en 2023, para que no haya heridos ni desencuentros. Y más allá de que después pueda haber un acuerdo llegado el momento.

La confianza del PRO por presentar un precandidato a gobernador no solo se debe al apoyo explícito del presidenciable Horacio Rodríguez Larreta a Maquieyra, que también cuenta con el respaldo de los otros referentes nacionales como Macri, Vidal y Bullrich.

En julio la consultora Isonomía realizó una encuesta para el PRO con el objetivo de saber cómo estaba el escenario político provincial. Los números favorables dieron impulso a las ilusiones de los amarillos por lanzarse para encabezar JxC frente al centenario, y territorial, radicalismo.

¿Qué dice esa encuesta? Aunque los números son de hace algunos meses, y en nuestro país dos meses es una eternidad, y con la salvedad de que fue encargada por ese sector, indica que hubo un avance del PRO como sigla en la consideración del votante pampeano como fuerza de oposición. Esto de la mano en gran medida por la agenda nacional y la consideración pública del no peronismo por los “tanques” nacionales que marcan bien en las encuestas.

El estudio mostraba además que en imagen positiva e intención de voto se despegaban Maquieyra y Kroneberger del resto de los posibles candidatos de JxC, y que ambos crecieron luego de 2021. Si bien el gobernador Sergio Ziliotto está arriba en apoyos electorales, la encuesta afirma que ha crecido el sello del PRO en La Pampa como alternativa electoral opositora dentro de JxC. Cuando se pregunta si se votaría a un candidato del PRO o a uno de la UCR dentro del espectro no peronista, los encuestados eligieron al sector amarillo de igual manera. Maquieyra además sería el más votado dentro de los posibles candidatos de la oposición, establece en otro apartado.

Por supuesto, esta es una medición encargada por un sector. Y además hay que ver las posibilidades concretas de cada fuerza en la realidad concreta. En una interna provincial, que no es obligatoria, los aparatos partidarios pesan porque los independientes no comprometen su participación. Allí la UCR está en su juego, y el PRO pierde fuerza ya que sus votantes son más autónomos. Distinto es cuando es una PASO nacional donde sí o sí hay que votar y la estructura no pesa. Es lo que ocurrió en buena medida en 2019, cuando Kroneberger derrotó a Carlos Mac Allister.

Maquieyra mientras tanto empuja los tiempos. Profundiza el discurso opositor, visita localidades, apuntala candidatos a intendente y arma encuentro regionales como ocurrió en General Acha, Macachín y Realicó. En lo interno, el camino le quedó despejado, ya que los sectores díscolos fueron quedando aislados tras el resultado de 2021. De hecho hubo dirigentes que buscaron acercarse a los libertarios.

Con un escenario favorable, el PRO se prepara en La Pampa para una interna en JxC. Los tiempos dirán si se da el choque o no.