Dos patrullas de la Seccional Primera fueron apedreadas y resultaron dañadas luego de que el personal intentara desbaratar una fiesta clandestina. También dañaron la ventana de una vecina. Todo ocurrió en la madrugada de ayer lunees, alrededor de las 3.30, cuando los efectivos tomaron conocimiento de una situación de «disturbios y música alta» y acudieron a una vivienda de la calle Olguín. Cuando llegaron al lugar, constataron que se estaba desarrollando una reunión ilegal, por lo que decidieron identificarlos.
Sin embargo, los sospechosos se dan a la fuga y desde la esquina de Olguín y Blanco Encalada empiezan a «arrojar piedras hacia los móviles y el personal», relataron fuentes policiales consultadas por LA ARENA. Otros de los involucrados incitaron a los efectivos a pelear. Una vez que lograron dispersar al grupo, compuesto por unas 15 personas, el personal constató que dos camionetas habían sido dañadas por las piedras en el capot. Además, habían roto la ventana de la casa de una vecina del lugar.
El personal de la Primera también desbarató una fiesta clandestina en una quinta. En el lugar, notificaron a 29 personas. El operativo policial se llevó a cabo minutos antes de las 6 de la mañana de ayer en una quinta de la calle Virgen de Fátima al 2.700.
Cuando los agentes llegaron al lugar comprobaron que una importante cantidad de jóvenes participaba de una fiesta clandestina prohibida en el marco de las medidas contra el coronavirus. A su vez, secuestraron bebidas alcohólicas, equipos de música, y otros elementos.
