Superar el COVID no es cosa sencilla. Por suerte existen personas, palabras y afectos que pueden con todo. Esta es la historia de Julia.

Julia Leyes tiene 47 años, vive en Macachín y pudo superar la enfermedad que causa esta pandemia mundial. Es una historia más, de las tantas que hubo, y seguramente seguirá habiendo, mientras dure este flagelo.

En el día Nacional del Libro, 15 de junio, destacamos esta historia porque tiene condimentos especiales; una amistad, un libro, una situación complicada y un gesto de nobleza proveniente de una personalidad reconocida a nivel nacional. Un tipo que se propuso como misión en la vida la de ayudar a los demás. No con dinero, sino con palabras que animan a seguir viviendo lo más feliz posible en este plano terrenal; Mario Massaccesi, un ángel de piel y hueso, un faro donde encontrar eso que estamos buscando; la felicidad plena.

Amistad

El 20 de diciembre del año pasado Julia cumplió sus años (47), como regalo de una amiga recibió un libro, ¿Por qué un libro? Bueno, por la sencilla razón que esa amiga, llamada Monina, tiene una librería, una de las pocas que tiene la provincia de La Pampa que se dedican a la venta de libros en forma exclusiva.

Monina nos cuenta que con Julia las une una gran amistad producto de encontrarse desde hace muchos años en las canchas, lugar al que concurren a acompañar a sus hijos. “Nuestros hijos son amigos desde los cuatro años, hemos recorrido muchas canchas juntas acompañando a nuestros hijos, muchos momentos lindos y felices con nuestros hijos, de ahí arranca mi amistad con ella”.

“Lamentablemente para algunos, desde que yo tengo librería, para los cumpleaños les regalo libros, no existe otra alternativa” dice Monina a modo de broma pero a sabiendas de la importancia que tiene ese gesto.

El libro en cuestión lleva el título “Soltar para ser feliz“, sus autores son el periodista, conductor de radio y televisión, y coach Ontológico Profesional, Mario Massaccesi, “El Negro”, y la licenciada en Psicología y Master Coach, Patricia Daleiro, uruguaya pero argentina por opción.

“Te va a ayudar un montón” le dijo Monina a su amiga el día que se lo regaló. Julia había comenzado con la lectura antes de padecer de coronavirus, “pero viste cómo es uno acá en la casa, que por ahí tiene tiempo y por ahí no” advierte, poniendo de manifiesto que las tareas de la casa son muchas y los tiempo para la lectura eran pocos.

En 365 páginas y 15 capítulos “El Negro” nos propone “Soltar”: “soltar el miedo, soltar el pasado, soltar a los hijos, soltar a la víctima, soltar los abusos”. “Es un libro básicamente de preguntas, preguntas que tal vez nunca dijiste o nunca te hubieras hecho” contaba en Cadena 3 allá por noviembre de 2020, pocos días después de haber lanzado su obra.

Monina explica porqué decidió que este libro debía ir a las manos de su amiga, “mirando el título, mirando las características y escuchándolo a él, que da placer escucharlo al “Negro” Massaccesi, consideré que era un buen regalo para Julia“.

En las ventas el libro ha tenido muy buena aceptación, al punto que hoy está agotada su tercera edición. “Se ha vendido muy, muy bien, es un libro lindo, con linda presentación, colorido y es de la editorial “El Ateneo”, explica la titular de la librería “Lo de Delfino”.

La historia detrás la foto

La foto que ilustra la portada de esta nota fue tomada en la ciudad de Santa Rosa. Allí se la ve a Julia recostada, muy concentrada leyendo su libro. “Las cosas pasan por algo” nos dijo Julia cuando hablamos por teléfono.

Cuando le diagnostican positivo de coronavirus, Julia ya presentaba síntomas que le hacían dificultoso obtener oxígeno por sus propios medios, es por ello que el personal de salud del hospital “Dr. Heráclio Luna” de Macachín deciden internarla en ese establecimiento.

Cuando me internaron acá, que estuve como dos días, le dije a mi hija que me llevara el libro, así aprovechaba y lo terminaba de leer” relata Julia. Pero su salud desmejoró y las autoridades hospitalarias decidieron que necesitaba de una atención más compleja y por ello la derivaron a la ciudad de Santa Rosa.

Durante su paso por la terapia intensiva, hubo días críticos, plegarias, oraciones, mensajes de aliento y fuerza, pero sobre todo mucha incertidumbre alrededor de su evolución. Julia la luchó con todas sus fuerzas, le puso hasta el último gramo de voluntad para poder salir; y salió.

Estuve tan mal que pensé que no iba a salir” admite con voz temblorosa. “Cuando vienen a verme me dicen “no llores”, pero lloro de felicidad porque realmente pensé que no iba a salir, y esto me cambió totalmente la mente” describe.

Una vez superado ese trance, y ya con más ánimo, Julia volvió a pedir por el libro, “cuando salgo de terapia me pasó algo especial, como una necesidad de leerlo“.

Con las buenas nuevas, su familia y amigos querían saber de ella, cómo estaba, qué hacía, y fue su hermana que para resumir el bienestar de Julia toma la fotografía que llegaría a las redes, y a los ojos de Mario Massaccesi gracias a su amiga Monina.

Cuando me mandan la foto leyendo el libro la verdad que me encantó, me encantó. Entonces subo a las redes sociales, como normalmente lo hago, etiquetó a las editoriales, que piden encarecidamente que se haga movimiento en redes, y etiqueto al “Negro” Massaccesi” cuenta Monina.

Además de eso le envió a Mario un mensaje contándole la historia de su amiga Julia, y pidiéndole que le envíe un mensaje, “para mi sorpresa me contestó al toque pidiéndome los datos de Julia, y que era lo que le pasaba y demás” agrega.

Pasaron cuatro o cinco días y no había resultados sobre lo solicitado por Monina, que pensó; “pedidos como el mío debe tener millones, capaz que se olvidó”; Pero no, ese domingo sonó el celular con un mensaje de Instagram, y allí estaba “el Negro” Massaccesi “con su lindo y emotivo saludo para Julia, así que nada, la verdad que se emocionó, me emocioné yo, la familia, todos“. “Uno reniega de las redes sociales pero acá está el lado bueno” reflexiona acertadamente Monina.

Julia nos relata que “el mensaje de él fue de una emoción, te levanta mucho el ánimo ese mensaje, leer su libro. Fue algo que no esperaba“. ¿Lágrimas? le consultamos, “ni te imaginas” fue su respuesta, escueta porque otras lágrimas se asomaban al recordar ese momento. “Un humildad “el Negro”. Son esas palabras que te levantan, estaba leyendo el libro, y que llegara eso me hizo re bien“.

Sobre el libro

Le pedimos a Julia que nos cuente de qué se trata el libro, y tal como lo dijo el autor, ella nos contó que “habla de cuando uno lleva esa carga de cosas que te han pasado en la vida, y te hace muchas preguntas, te cuestiona. Porque hay muchas cosas por las que te sentís culpable y no, no es así. Por ejemplo lo que me pasó cuando yo era chica que sufrí de bullying al ser gordita, todas esas cosas hay que soltarlas, dejarlas, porque uno no es feliz. Soy una persona que he perdonado muchas cosas y que me han marcado. Tenés que soltar, dejar ir esas cosas“.

Al igual que Monina, Julia recomienda la lectura de este libro, “está muy bueno, me encanta, es un libro hermoso. Hay que sacarse esa mochila, ser feliz porque la vida es una sola”.

Mensaje motivador

Antes de colgar la llamada le pedimos un mensaje que pudiera servir a nuestros lectores, a nosotros mismos, y con su cálida voz Julia nos dijo: “Es tan linda la vida, es tan linda. Les contaba a mis hijos lo rica que encontré el agua después de pasar esas 72 horas en terapia, esas cosas, cómo no valorar“.

Todas las oraciones y plegarias que se hicieron en nombre de ella le llegaron como un mar de luz que le dio las fuerzas necesarias para poder salir de ese momento. Hoy piensa en ella, en ser feliz consigo misma, piensa en empezar a cuidar su cuerpo “con mi obesidad que siempre me dejé estar”, y fue ese libro el que le enseñó a “Soltar para ser feliz“, “porque todavía nos queda vida para serlo. Nada de se compara con la vida. Gracias a todos, y a la vida por estar acá de vuelta“.

 

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